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29 marzo 2016

La familia más odiada

Artículo de opinión pulicado en El Nacional: http://www.el-nacional.com/jesus_rangel_rachadell/familia-odiada_0_819518162.html

Fred Waldron Phelps, fue un predicador de la teología antihomosexual en Estados Unidos; que promueve la homofobia, el odio y la violencia. Asevera que los gays acabarán en el infierno, al igual que los que los apoyan. Si eso no fuera suficiente, también proclama el odio a los judíos, son antisemitas y racistas.
Este personaje se hizo conocido por un documental de la BBC sobre la Iglesia Bautista de Westboro, tituladoThe Most Hated Family in America (La familia más odiada de Estados Unidos) realizado por Louis Theroux.
Lo que comunica el documental es el odio del predicador; quien, entre otras estrategias, despliega a su feligresía en funerales de soldados muertos en Irak o Afganistán, basados en la creencia de que las muertes de militares son un castigo divino por la tolerancia social de la homosexualidad.
La Iglesia Bautista de Westboro está constituido por familiares directos e indirectos hasta en 80%, quienes viven en un conjunto de viviendas colindantes o cercanos. Este grupo hace participar a los niños desde muy temprano en las actividades públicas, levantan pancartas y vocean consignas contra los que consideran pervertidos y en contra de los que apoyan a un “país de maricas”. Es un lavado de cerebro al que someten a los niños, a los que los hacen tomar posturas que, como consecuencia de su corta edad, no comprenden, no pueden discernir lo que es bueno o malo, y simplemente aceptan las posiciones que les enseñan sus mayores. En la adolescencia asumen como verdadero una sola forma de pensar, hasta el punto de considerar a todos sus compañeros de estudio como unos falsos que marcharán al infierno por apoyar a la sociedad corrupta de su país.
El presidente Bush, para combatir la campaña iniciada por Fred Phelps y sus seguidores, firmó el Respect for America's Fallen Heroes Act (Ley de respeto por los héroes fallecidos de Estados Unidos). Mediante esta ley se prohibió la manifestación de cualquier ruido o actividad que perturbe la paz y el buen orden de un funeral o la ceremonia, en los cementerios bajo el control de la Administración Nacional de cementerios o en el cementerio nacional de Arlington; a menos que la manifestación haya sido aprobada por el respectivo superintendente o el director de la propiedad en la que está situado; esto incluye las carreteras, caminos, u otras vías de acceso o salida. Se fundamentó en que las protestas están protegidas por la Primera Enmienda (libertad de expresión), pero incitar al odio no lo está. La ley obliga a los manifestantes a permanecer a 90 metros de la entrada de cualquier cementerio nacional, y limita el tiempo de la protesta entre 60 minutos antes y después del funeral. Las sanciones van desde multa hasta la cantidad de 100.000 US$, y un año de prisión.
Entre los íconos que combate esta Iglesia están Elizabeth Taylor y la princesa Diana. Rechazan y condenan a lesbianas, gays, bisexuales y transexuales, católicos, musulmanes y judíos; así como a los que consideran que apoyan a estos grupos, como los suecos, canadienses, irlandeses, británicos, mexicanos y estadounidenses. El lema de esta Iglesia es “Dios odia a los maricones”.
Todo esto suena feo, y muy feo, pero es semejante al comportamiento de los representantes del socialismo del siglo XXI, cuando, por ejemplo: en el año 2012, Maduro se refirió a la oposición como "sifrinitos, mariconsones y fascistas". En el año 2013, el diputado Carreño se refirió a Capriles como homosexual y maricón; y en el 2015, este mismo diputado en un programa de televisión en horario infantil, llamó a la oposición “flojazos los coños de madre”, lo cual tuvo por reacción de William Castillo, presidente de Conatel, un recordatorio a Globovisión como responsable del uso de lenguaje soez en ese medio de comunicación, pero al diputado no lo tocó, ni con el pétalo de una rosa. Y recientemente los insultos en cadena nacional contra el presidente de empresas Polar y al presidente de la Asamblea nacional.
Esta forma de expresar odio fue utilizada muchísimas veces por el Comandante Intergaláctico, particularmente cuando en el 2010, dijo: “aprovecho para condenar de nuevo, desde el fondo de mi alma y de mis vísceras al Estado de Israel. Maldito seas Estado de Israel”. En el 2005, calificó a Monseñor Rosalio José Castillo Lara, como “fariseo, hipócrita, bandido, diablo, alcahueta, golpista e inmoral”. En enero de 2007, expresó: Cristo era comunista; y al final de 2007: “Se podrán vestir de cardenales, de obispos, de todo, pero ustedes son el propio demonio..., defensores de los más podridos intereses… ¡Son unos verdaderos vagabundos, del Cardenal para abajo!... ¡Es un inmoral, es un sinvergüenza este Cardenal!, ¡es un maleante!… ¡Es pervertido el cardenal!”. La enumeración de estos insultos es larga, y ya otros la han recopilado.
Observando la falsa revolución y la familia/secta que busca predicar sus ideales por medio de la violencia verbal, a la cual le interesa sumar seguidores perturbados por el resentimiento, y esparcir su mensaje de odio; no entiendo cómo pretende el gobierno, con este mismo comportamiento, conquistar simpatizantes irrespetando a otros seres humanos con ese lenguaje soez y vulgar.
@rangelrachadell

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