Analytics

28 enero 2020

Igual que Bolívar

Imagínense a unos jóvenes dirigentes venezolanos que van a Londres a tratar de reunirse con el gobierno británico para pedir ayuda por la libertad de Venezuela. Estos muchachos logran una entrevista privada con un alto funcionario y obtienen el compromiso de ejercer presiones. Mientras tanto, el gobierno de Caracas protesta por las gestiones que están realizando. No me refiero a Juan Guaidó, eso hicieron Simón Bolívar, Andrés Bello y Luis López Méndez, en 1810.
Sin embargo, si unos muchachos salen a pedir intervención militar todos los critican. Resulta que Bolívar pidió al Gobierno de Cartagena que lo autorizaran para intervenir en territorio del Gobierno de las Provincias Unidas de Venezuela, se efectuó la batalla de Cúcuta y lo nombraron brigadier.
Si el presidente de Estados Unidos dijera de un venezolano que adquirió la reputación de ser un gran estudioso de un hombre de conocimiento universal, lleno de sagacidad, una mente inquisitiva con una insaciable curiosidad. Que su tema de conversación permanente era la libertad de su país, su inmensa riqueza, sus recursos inagotables, su innumerable población, su impaciencia bajo el yugo, y su disposición a quitarse de encima la dominación extranjera. Usted pensaría que se refiere a Guaidó, pero no, esto fue lo que dijo John Adams sobre el viaje de Miranda a tierras norteamericanas.
Para colmo, si el gobierno de Maduro pide negociaciones no hay garantías de que haga al igual que Domingo de Monteverde, quien incumplió los compromisos que hizo a Francisco de Miranda en su armisticio de 1812, entendido por los españoles como la Capitulación de San Mateo. Tan es así que en la cláusula tercera dice: No podrán ser aprehendidos, juzgados ni sentenciados a ninguna pena corporal ni pecuniaria, las personas que se crea o juzgue que han promovido y seguido la causa de Caracas en estas provincias…, y el general español respondió: Las personas y bienes que se hallen en el territorio no reconquistado serán salvas y resguardadas; dichas personas no serán presas ni juzgadas. Preso el generalísimo luego muere en una cárcel en España. Puras promesas y no cumplieron, al igual que el gobierno de Maduro. ¿Qué pasó con la liberación de los presos políticos? Espero que estos chavistas, indignos hijos políticos de Monteverde, algún día respeten sus promesas.
Los gobiernos que apoyan al presidente de la Asamblea Nacional dicen que no quieren una salida violenta y que el problema venezolano debe ser resuelto mediante elecciones. Este razonamiento me recuerda al de Gran Bretaña entre 1810 y 1817, una supuesta neutralidad que, en esa época, se tradujo en voluntarios, veteranos de guerra, oficiales, armas y pertrechos. Aunque puede existir una la ley como la de 1819 que limite el reclutamiento de súbditos británicos sin el permiso de la corona.
El problema es que el dictador no nos permite resolver nuestras diferencias como lo hacen los pueblos civilizados (así se expresaron Bolívar y Morillo en el Tratado de Armisticio y Regularización de la Guerra). Por ejemplo, todo lo relacionado con la designación de los rectores del Consejo Nacional Electoral es una trampa, más cuando el Tribunal Supremo de Justicia reiteró en enero de 2020 que los actos de la Asamblea Nacional resultan manifiestamente inconstitucionales y, por ende, absolutamente nulos y carentes de toda vigencia y eficacia jurídica, incluyendo las leyes que sean sancionadas, mientras se mantenga en desacato a las sentencias de ese tribunal. La designación del Poder Electoral la hará el TSJ y seguiremos con la ficción de ser una República.
El presidente de la Asamblea Nacional en funciones de presidente de la República, Juan Guaidó, puede parafrasear el Decreto de Guerra a Muerte, expresando:
Todo (militar) que no conspire contra la tiranía en favor de la justa causa por los medios más activos y eficaces, será tenido por enemigo y castigado como traidor a la patria, y por consecuencia será irremisiblemente (detenido). Por el contrario, se concede un indulto general y absoluto a los que pasen (a la oposición) con sus armas o sin ellas; a los que presten sus auxilios a los buenos ciudadanos que se están esforzando por sacudir el yugo de la tiranía. Se conservarán en sus empleos y destinos a los oficiales de guerra y magistrados civiles que proclamen el gobierno de Venezuela y se unan a nosotros; en una palabra, los (chavistas) que hagan señalados servicios al Estado serán reputados y tratados como (opositores).
No sé si nos dirigimos hacia un conflicto de mayores proporciones, pero a veces la historia nos hace unos guiños curiosos.


@rangelrachadell

14 enero 2020

El Copei actual

Hace tres años escribí un artículo sobre Copei, en el que daba cuenta de las últimas vicisitudes de este partido. La novela continuó, con aderezos propios de estos tiempos de dictadura, ya que en política no hay cadáver insepulto, como dijo Rómulo Betancourt al referirse a Jóvito Villalba y su apoyo a la elección del presidente de la República, Luis Herrera Campins. Nada quita que esta organización pueda renacer del foso en el que el Tribunal Supremo de Justicia la ha precipitado.
Roberto Enríquez, presidente electo de Copei, sigue perseguido por los tribunales militares del gobierno de Maduro y aún se encuentra en la casa del embajador de la República de Chile. El partido, en manos del TSJ desde julio de 2015, ha postulado a quien le ordena Diosdado. Triste aniversario el del 13 de enero.
El descalabro del partido empezó en 2005, cuando Luis Ignacio Planas, con el permiso de su entonces presidente Eduardo Fernández, consiguió una mayoría para desconocer la memoria y cuenta de ese año, por lo que tuvo que renunciar toda la directiva. Un mes antes, la Dirección Nacional procedió a cambiar a miembros con derecho a votar en la máxima asamblea y así conformar el quórum favorable a ellos. A continuación, fue designado Planas como secretario general.
Una de las medidas de Luis Ignacio fue la destitución de la Comisión Electoral, después de haber convocado a elecciones internas, lo que obligó a Edgar Parra Moreno a ir al TSJ a reclamar su derecho al ejercicio de esa responsabilidad en Copei, lo cual le reconoció la Sala Electoral. Planas se comió la manzana y de allí el pecado original.
Después de muchas sentencias, desde 2015 cuando el TSJ le entregó la dirección del partido a cinco desconocidos afectos a Pedro Pablo Fernández, alias el Tigrito (ver sentencia de la Sala Constitucional N° 1.023 del 30-7-2015); gracias a Diosdado pudieron postular a las elecciones de gobernadores y alcaldes en 2017, desconociendo a los liderazgos locales. En los comicios presidenciales de 2018, ese proceso electoral que todo el mundo ha dicho que fue fraudulento por, entre otras medidas, haber anulado a los partidos y candidatos de oposición que no participaron en las elecciones anteriores, el Copei controlado por el gobierno postuló a Henri Falcón.
Luego de la grosera intervención de Copei se sucedieron otras sentencias, pero no los atormentaré con la larga relación, solo las dos últimas. El TSJ impuso a otras autoridades, en total acuerdo con el Tigrito, como presidenta escogieron a Mercedes Malavé y como secretario general a Juan Carlos Alvarado (ver sentencia de la Sala Constitucional N° 323 27-08-2019). La Sala expresó: “Declarado lo anterior, y cumplido como ha sido el objeto de la presente acción de amparo constitucional, esta Sala ORDENA el cierre y el archivo definitivo del presente expediente. Así se declara”.
En esa decisión el Tigrito quedó de quinto vocal, y el anterior miembro de la junta designada en 2015 Miguel Salazar fue el sexto vocal. Este último dato es sustancial, ya verán.
El 18 de septiembre de 2019, en el programa Con el mazo dando, Diosdado Cabello dijo: “El miedo es libre, hay algunos que lo estuvieron llamando para que no firmaran ni apareciera; ¿verdad Tigrito?, pero ellos ya se habían comprometido”. También comentó que Eduardo Fernández estaba incluido en el acuerdo. Todo lo anterior fue negado por el padre y el hijo, solo faltó el Espíritu Santo.
El 2 de diciembre de 2019, dos meses y medio después del malsano comentario de Diosdado, el TSJ, en el mismo expediente que estaba cerrado y archivado, sustituye de nuevo la junta de Copei. Hacen el cambiazo, expresando: “Se DESIGNA en forma temporal la junta directiva ad hoc del partido nacional Copei”; sale la presidenta y, el sexto vocal, Miguel Salazar pasa a ser presidente. Les colocó la espada de Damocles, de estar clausurado el caso a tener una precaria estabilidad.
La sentencia reseñada, expresa: Ahora bien, en esta oportunidad esta máxima instancia de la jurisdicción constitucional no puede dejar pasar por alto, que las discrepancias surgidas nuevamente en el seno interno de la organización política nacional Copei revelan la existencia de contradicciones en la estructura organizativa interna de dicho partido de naturaleza nacional, las cuales generan incertidumbre e inseguridad jurídica en el colectivo de su militancia, respecto de quiénes tienen la legitimación como máximas autoridades estatutarias de dicho partido nacional, para el ejercicio de las atribuciones que se establecieron en los Estatutos internos del partido nacional Copei. (ver sentencia de la Sala Constitucional N° 461 2-12-2019).
Hablando de contradicciones. Eduardo Fernández, que no dijo nada cuando el TSJ desconoció la investidura de Roberto Enríquez como presidente en 2015 (la consecuencia fue que los demás partidos de oposición se adueñaron de las postulaciones de Copei a diputados a la Asamblea Nacional), y que tampoco se manifestó al ser designada la directiva afín a su hijo, reclamó el 6 de diciembre de 2019, en un artículo de opinión publicado en el diario Últimas Noticias, titulado «¿Y ahora?», con frases como estas: El pleito interno llevó a algunos compañeros a acudir a los tribunales a dirimir sus diferencias, sabiendo que los tribunales de justicia están al servicio del gobierno… Un zarpazo del inefable TSJ volvió a poner en evidencia que para el gobierno no hay espacio para la grandeza y los nobles ideales… El gobierno pretendió hacer de Copei un instrumento al servicio de sus intereses… El gobierno tiene mucho poder y dinero.
Sigan negociando con el gobierno. Así paga el diablo.
@rangelrachadell

24 diciembre 2019

Mi carta al Niño Jesús

Querido Niño Jesús, te escribo como cualquiera que cree que nuestro Salvador renace cada 25 de diciembre y nos trae la esperanza de una nueva y buena vida después de esta. Con el derecho de haberme portado bien, te pido que hagas unos cuantos milagros, no que me traigas nada. Deseo que la oposición y el gobierno mejoren algunas aptitudes y cambien sus actitudes, de la manera que te expongo a continuación:
Te invito a que le susurres al presidente encargado por la Asamblea Nacional Juan Gerardo Guaidó que deje de prometer lo que es difícil cumplir, eso de crear expectativas que no dependen de él no es responsable, y lo peor, la oposición se decepciona. Yo espero que eso no suceda. Lucir tal cual un Superman que resolverá todos los males es válido si se tienen los poderes del superhéroe, pero de no poseerlos hay que limitarse a sus fuerzas, arroparse hasta donde llega la cobija. Parece que en la Fuerza Armada no hay interlocutores dispuestos a enfrentar a la Presidencia, y saben contar que 2 más 2 no abate al dictador, necesitamos 10. Recuerda que Raúl Isaías Baduel contó cañones con los alzados en abril de 2002 y su apoyo a Chávez fue fundamental y no triunfó el golpe de Estado que nos hubiera evitado la crisis que nos mantiene en estas penurias. Por eso, plantarse fuera de la base aérea La Carlota, o como se llame, se asemejó a unos efectos especiales dando la impresión de que los militares se sumaban a la causa. Por cierto, que no confíe en nadie del régimen, está demostrado que no tienen palabra.
No he terminado con Guaidó. También, mi Niño, te suplico que lo convenzas de renegar de la idea de que el gobierno de Estados Unidos tiene la firme voluntad de derrocar a la ineptocracia que nos gobierna, por lo menos que le quite el “firme” a ese pensamiento. Hay que reconocer que el apoyo de los gringos ha sido y es muy valioso, es una piedra en el zapato de Maduro que no lo deja bailar. Ese cuento de todas las opciones sobre la mesa tampoco rima con tumbar ni defenestrar, esta última palabra que viene de lanzar a alguien de una ventana al igual que hicieron en el Sebin con Fernando Albán.
Te invito a que le cuchichees al usurpador la realidad que estamos viviendo, aunque él no crea en ti, pero igual manifiéstate, ya que tú haces portentos. Cuéntale que la gente se muere y que tenemos familias separadas, de la ausencia de medicinas, con un paseo por el Hospital de Niños es suficiente. Exígele que de una vez por todas arregle la electricidad y produzca gasolina, problemas que son su responsabilidad. Sus actuaciones parecen dirigidas por el maligno, porque eso de quitarle la felicidad al pueblo es propio de la dureza de corazón que lo caracteriza. Hoy no recibirán la Navidad con sus parientes los presos por causas políticas; dales tu apoyo en estas crueles circunstancias. Estos cautivos nunca pudieron menoscabar el control absoluto que tiene el tramposo de las instituciones, su servidumbre ocupa los puestos en el Tribunal Supremo de Justicia, el Consejo Nacional Electoral y la Contraloría General de la República, cumplen con todas las instrucciones de manera expedita. Mucho dolió la cobardía de perseguir a los diputados de la Asamblea Nacional, por lo que, querido Niño, contamos con tu severidad al aplicar los castigos.
Donald Trump no merece quedarse por fuera de la lista de peticiones, por eso aspiro a que lo llames por teléfono, tengo la idea de que es sordo, explícale que el pueblo venezolano se muda al norte por las malas condiciones que se viven por aquí, y si es posible que le dé derecho al paro forzoso mientras consiguen trabajo en el imperio. Dile que favorezco todas las disposiciones que ha acordado el gobierno americano contra los 40 ladrones, pero que esta plaga es resistente, por lo que sugiérele otras medidas, las que tú quieras, sorpréndeme. Eso de la inmigración es moda nueva de mis connacionales, se van con sus bártulos y no le alcanzan los ahorros, se gana y se gasta en dólares. Así, no se puede.
Este año que viene debes estar pendiente de las universidades, la dictadura tiene previsto intervenirlas, cambiar las autoridades y proceder a impartir clases de socialismo del siglo XXI, de destrucción de un país y de injerencia en las democracias del continente, tipo Cuba.
Finalizando, te pido que los funcionarios del Saime quiten el bloqueo a las visas de los sacerdotes católicos para que ingresen legalmente al país. Esa política de represión contra la Iglesia Católica e impedir que el cardenal Baltazar Porras sea el obispo de la Arquidiócesis de Caracas debe ser corregida.
Ahí te lo dejo Yisus.
@rangelrachadell

10 diciembre 2019

El ejército de los milancianos


La milicia bolivariana no puede ser un componente de la Fuerza Armada por cuanto la Constitución no la menciona. Por lo pronto, los artículos 328 y 329 de la CRBV hacen referencia al Ejército, la Armada, la Aviación y la Guardia Nacional, nada más.

Una ley no puede crear un nuevo cuerpo armado, ya que la enunciación de los órganos militares es exclusiva, cerrada. Diferente sería si la redacción expresase: y otros componentes, pero no fue así. La asamblea nacional constituyente no puede alterar lo que expresa la Constitución, pues su fin es redactar una nueva carta fundamental. Eso de aprobar leyes sin base constitucional es de mal gusto, falta de clase, ignorancia revolucionaria. Dictadura y autoritarismo puro y ramplón.

Por otra parte, confeccionar una Constitución no es como remendar una colcha con retazos. Hoy pego este artículo aquí y mañana otro allá. O mejor, sin cambiar la que tenemos, en un salto cuántico de realismo mágico, donde dije digo, digo Diego. Tomen muchachos, ahora tienen la base constitucional que les faltaba.
Ahora Maduro dice que la milicia la conforman 3.300.000 efectivos, y el 12 de noviembre pasado que eran 3.295.335, en veintiséis días creció en 4.665 personas, a casi 180 viejitos por día. Gran logro revolucionario. A ese ritmo serán 65.000 más en un año, pero no los 4 millones ofrecidos.

Un dato interesante, dijo que tienen 321.433 fusiles a ser entregados, eso viene a ser algo así como armar a 10% de la milicia. Me imagino que debe haber muchos otros ancianos armados, por ejemplo, a los 740 que ascendió y le entregó armamento en el patio de la Academia Militar en julio pasado, aunque de esos no he visto a ninguno. Si puede, pídale a un miliciano que le enseñe su arma de reglamento, es posible que le diga que la dejó en su casa.

Le aseguro que todos esos números son exagerados. Antes de continuar, quiero rememorar un hecho de los tempranos años setenta, cuando fue recogida una edición del diario El Mundo por haber informado la cantidad de efectivos del Ejército. Produjo mucha preocupación que los países vecinos supieran el número de militares que teníamos en caso de una invasión, sobre todo de Colombia. Esto lo traigo a cuenta ya que un militar que conozco, siendo yo un niño en ese momento, en mi presencia dijo que verificando el contrato de compra de botas se podía estar al tanto de los beneficiarios. Además de la mencionada referencia, hay muchos otros indicadores que permiten determinar si esas 3.300.000 personas existen o es el producto de una mente calenturienta. En Venezuela no se conoce cuántos barriles de petróleo producimos, pero el resto del planeta sí está al corriente de nuestra producción, y eso es porque hay publicaciones externas que analizan estas cifras.
Si fuera verdad que existen esos milicianos y le suma los que trabajan en la administración pública, resulta que un cuarto de la población que queda en el país tiene un sueldo del gobierno, y el otro 25% tiene las misiones y las cajas CLAP, lo cual no es cierto. Es más, no tenemos suficientes militares para entregarles los 321.433 fusiles, incluida la supuesta milicia. Revise la página web del Min po po de Defensa, en ella se publica que “la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) de la República Bolivariana de Venezuela está integrada por alrededor de 95.000 a 150.000 combatientes activos, entre ellos, una creciente Milicia Nacional formada por cientos de miles de personas en capacidad de prestar servicios como reservistas”. No se refiere a millones, que debería ser lo correcto. Van a pasar escardilla al sol.

En un artículo de opinión comenté que a los fiscales del Ministerio Público no le renuevan los pasaportes para que no huyan del país; a los oficiales menos. Las deserciones son tan evidentes que no pueden ocultar que la tropa y quienes la comandan se van por los caminos verdes. Todo esto es por causa del hambre que también están pasando en los cuarteles. Vladimir se quejó, no es ningún secreto.

Tampoco es que Maduro necesita otra ley, ya tiene la Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (publicada en Gaceta Oficial el 19-11-2014) que bastante se refiere a los milicianos y allí está definida la doctrina de cada componente. Sin embargo, es posible que quiera instaurar una nueva categoría de normas, las leyes constitucionales que están por encima de las orgánicas, y las que la Constitución no menciona para nada. Con este nuevo tipo de ley se busca elevar la jerarquía de esa ley, algo así como crear un rango por arriba de General en Jefe. Puede ser Gran Mariscal, Generalísimo o Gran Almirante. Vladimir, escoge tu boato a estrenar.

En el referéndum de la Constitución del 2 de diciembre de 2007 yo voté, entre otras propuestas, en contra de la milicia nacional bolivariana y ganó el NO. Sin embargo, los vestidos de verde prefieren halar mecate.

@rangelrachadell


26 noviembre 2019

Los impresentables

La política venezolana tiene de todo, encontramos un gobierno que habla de paz y no protege a los ciudadanos, los expulsa del país con sus desastrosas políticas. Los militares no protegen a la Patria de las malas influencias extranjeras, no combaten la expoliación de sus recursos por Cuba y están en todos los negocios. Hay sindicatos que no pelean por reivindicaciones. Por otra parte, una oposición que se aferra a la esperanza de convencer a las fuerzas armadas que cambien de bando, ya que la solución electoral se ve remota en esta autocracia. También, existen dos tipos de rebeldía dentro de la oposición, una que pide ser más radical sin emprender nada ella misma y la que se hace llamar oposición y se reúne con Maduro para lavarle la cara; ambas representan el pensamiento de pequeñas minorías.
Los disparatados seudo opositores son Timoteo Zambrano, Claudio Fermín y Felipe Mujica que constituyeron junto a Maduro la Mesa Nacional por Venezuela, y se dice que los acompaña Eduardo Fernández por medio de su hijo Perucho, para ofrecer una alternativa de salida a la crisis que nos agobia. Hablan de libertad de los presos políticos, promesa que se desinfló al no poder lograr la excarcelación de diputados con inmunidad parlamentaria, aunque hay secuestrados con más tiempo y mayores sufrimientos quienes nunca debieron ser detenidos si esto que vivimos fuera una democracia. El regreso del PSUV a la Asamblea Nacional no es un logro de ellos, es la estrategia de Maduro para dar una apariencia de funcionamiento institucional. El nombramiento de un nuevo Consejo Nacional Electoral, acordado con el gobierno, es otro de los supuestos logros-promesas de la mediación de estos impresentables, camino que está lejos de ser transitado sin trapisondas.
Los dirigentes que se reúnen con el gobierno plantean una representación proporcional en el CNE, cuando la Constitución expresa en el artículo 296 que ese Poder estará integrado por cinco rectores no vinculados a organizaciones con fines políticos. Es decir, el CNE debe conformarse con ciudadanos fuera de la estructura de los partidos o cuotas de estos, y mucho menos que se mantenga ninguno de los actuales miembros. No me imagino a Tibisay promoviendo la confianza en el voto como instrumento para manifestar y respetar la voluntad de los electores. Lo que se necesita en esos cargos son personas que se comprometan a cumplir la Constitución y las leyes, limiten la discrecionalidad del órgano electoral, sin cambios de reglas a medida que favorezca a los salteadores del presupuesto nacional, con acceso total a la información que se procesa y que protejan el derecho a la participación de los venezolanos.
Este grupo de colaboracionistas no habla de elecciones presidenciales, ya que consideran justas, válidas y legales aquellas en las que se eliminaron los partidos políticos que tenían derecho a participar y se inhabilitaron a eventuales candidatos. No quieren revisar los desafueros del pasado, se concentran en el futuro electoral que les permita convertirse en la nueva oposición.
Un ministro habló de la Mesa Complementaria Electoral conformada por partidos minoritarios. Me imagino que quiere decir complementaria al PSUV. El funcionario informa que se está discutiendo la representación proporcional de diputados en el Parlamento. Esa misma que eliminó el gobierno gracias a la mayoría que tenía en la Asamblea Nacional al aprobar la Ley Orgánica de Procesos Electorales en 2009, por la que se estableció un sistema electoral que lleva a la existencia de solo dos partidos e impide la presencia de distintas manifestaciones de la sociedad.
Ha sido política del gobierno, desde sus inicios, eliminar la proporcionalidad. Lo dijo la Sala Electoral, cuando decidió el recurso de interpretación interpuesto por Luis Manuel Esculpi y José Gómez Febres, directivos de la organización política Izquierda Democrática. En ese pronunciamiento expuso que en la Asamblea Nacional solo puede existir “la representación de cada entidad federal y la representación de las minorías, este último elemento referido exclusivamente a la participación protagónica de los pueblos indígenas”. Según el TSJ, la única minoría son los indígenas. Sentencia de la Sala Electoral Nº 17, 14-03-2000.
El gobierno ha insistido, a través de su órgano judicial el TSJ, en un concepto que va en contra vía de la representación proporcional y no existe en la Constitución, lo llaman democracia directa, una especie de asambleísmo tumultuario que decide todo lo concerniente a la vida en sociedad. Inventaron que hay dos maneras de ejercer la soberanía que reside en el pueblo, una es la democracia indirecta ejercida por medio del sufragio y la otra la democracia directa que supone “la organización de grupos humanos según su especialidad laboral, profesional, su condición social, la necesidad de su especifidad étnica o cultural o la especial protección que requiere una discapacidad física, motora o etaria”, para evitar que los derechos se “pierdan” en la masa. Sentencia de la Sala Constitucional Nº 470, 27-06-2017.
Este criterio de los sectores fue el aplicado en la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente de 2017 y fue ratificado en la orden de realizar elecciones en la Universidad Central de Venezuela de agosto de 2019. Olvídense de la representación proporcional y menos de las minorías. Lo que quiere el gobierno es todo el poder para las comunas, divididas en parcelas y controlar cualquier participación.
Los impresentables le están haciendo el juego al gobierno, y son grandecitos para que los tomen por inocentes.
@rangelrachadell

12 noviembre 2019

Informe de la OEA y las computadoras

El Informe de Hallazgos Preliminares del Análisis de Integridad Electoral de las Elecciones Generales en el Estado Plurinacional de Bolivia por los comicios del 20 de octubre de 2019, efectuado por la Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia de la Organización de Estados Americanos, revela las irregularidades encontradas.


Lo primero que hay que aclarar es que en Venezuela no hay observación electoral por parte de ningún órgano internacional desde 2006, cuando el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, firmó en Caracas el acuerdo de observación electoral con la presidente del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena. Lo segundo es que en Bolivia ha actuado la OEA dirigida por el secretario general, Luis Almagro Lemes, lo cual demuestra el compromiso por la democracia del continente. No hay que dejar de lado que el doctor Gustavo Tarre Briceño es el embajador designado por la Asamblea Nacional como representante permanente de Venezuela.


Al día siguiente de las elecciones en Bolivia, la Misión de Observación Electoral de la OEA llamó a que se respetara la voluntad de la ciudadanía; testificó la inequidad evidente entre las candidaturas; manifestó su profunda preocupación y sorpresa por el cambio drástico y difícil de justificar en la tendencia de los resultados preliminares conocidos tras el cierre de las urnas; señaló que el Tribunal Supremo Electoral de Bolivia (órgano que hace las elecciones) generó pérdida de confianza en el proceso electoral; instó a la autoridad electoral a que defendiera decididamente la voluntad de la ciudadanía boliviana con estricto apego a la Constitución y sus leyes complementarias de manera ágil y transparente; y pidió que se mantuviera la calma y se evitara cualquier forma de violencia en esa delicada situación, para que los cómputos departamentales se desarrollaran con normalidad y sin interrupciones y con garantías para los observadores y el personal electoral. Como punto final, expresaron que mantenían la esperanza de que el resultado del cómputo definitivo se apegara a la voluntad de los electores manifestada en las urnas.


La Misión Electoral, el día 6 de noviembre, condenó los actos de violencia; mostró preocupación por la abundante información falsa que circula en las redes sociales, incluida aquella que busca dañar la reputación de la auditoría y sus técnicos; y aseveró que se mantendría en Bolivia hasta que concluya el análisis de integridad electoral sobre los comicios del pasado 20 de octubre que efectúa el equipo técnico de la Secretaría General de la OEA.


Me voy a concentrar en una sola de las irregularidades a las que se refiere el Informe de Hallazgos Preliminares de las Elecciones de Bolivia, de fecha 10 de noviembre, una como la que declaró la empresa Smartmatic el 6 de marzo de 2018, cuando dijo que el CNE había anunciado resultados diferentes a los reflejados por el sistema de votación durante las elecciones a la asamblea nacional constituyente, que se había agregado de forma irregular más de 1 millón de votos y que no podía garantizar la integridad del sistema, ni podía certificar la exactitud de los resultados. En Bolivia, la Misión de Observación dice que hay un servidor (equipo de computación) que no se utilizó para el fin para el cual fue notificado. La auditoría de la OEA detectó que el flujo de la información de transcripción, tras la interrupción, fue redirigido a un servidor que no pertenecía a los previstos para el Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares en la nube, ni a los equipos físicos de la Dirección Nacional de Tecnología de la Información. Sumado a esto, no era controlado por la empresa auditora, ni por funcionarios del Servicio de Registro Cívico ni técnicos de la DNTIC, sino por alguien externo. El mencionado equipo no figura en los informes que les entregó el tribunal y todos los actores omitieron su existencia hasta ser detectado por los auditores de la OEA. Relatan que el flujo de actas llegó al servidor principal del Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares por dos vías diferentes que no estaban controladas por la empresa auditora y que se modificó el Protocolo de Internet (IP) a 350 equipos, en lugar de utilizar los servidores previstos, lo cual consideraron muy grave. El servidor de respaldo no tenía la misma cantidad de registros y no contaba con la misma información en sus bases de datos. Desde un servidor en una red vulnerada se estableció comunicación con la red del cómputo oficial para transferir datos. La conclusión fue: no es posible dar certeza de los resultados.


Recuerdo que la Misión de Estudio del Centro Carter recogió en su informe sobre las elecciones presidenciales de Venezuela del 14 de abril de 2013 que hubo denuncias acerca de una interrupción por más de 20 minutos del servicio de Internet de banda ancha de Cantv en el momento en que los centros de votación comenzaban a cerrar y el sistema empezaba a procesar los datos de votación. El CNE se defendió aseverando que las máquinas de votación encriptan la transmisión de los votos a través de una red segura y que, si bien la misma es operada por Cantv, funciona de forma independiente del servicio de Internet.


Cualquier parecido con la realidad es muy similar.


@rangelrachadell

29 octubre 2019

Syllabus socialista


Ya lo dijo el papa Pío IX, en el índice de los principales errores del siglo XIX, conocido como Syllabus complectens praecipuos nostrae aetatis errores, estaban el socialismo y el comunismo… (IV).

En la encíclica Nostis et nobiscum, Pío IX se refirió “a los nefandos sistemas del nuevo socialismo y comunismo”, y en la Qui pluribus a “la nefanda doctrina del comunismo, contraria al derecho natural, que, una vez admitida, echa por tierra los derechos de todos, la propiedad, la misma sociedad humana… se insinúan fraudulentamente, con especie de piedad sincera, de virtud y disciplina, penetran humildemente, captan con blandura, atan delicadamente, matan a ocultas, apartan de toda religión a los hombres y sacrifican y destrozan las ovejas del Señor… siembran doctrinas pestíferas, depravan las mentes y las almas, sobre todo de los más incautos, y causan perjuicios graves a la religión”.


Hay quienes puedan estar en desacuerdo con otras ideas del papa Pío IX, pero en su rechazo al comunismo fue muy acertado. Considerando que las mencionadas encíclicas se publicaron entre 1846 y 1849, tuvo una visión clara de lo que se convertiría esa ideología con el paso de los años, un experimento social que, manteniendo en constante agitación a la sociedad, promete el paraíso gratis en vida, ocupando las propiedades ajenas y utilizándolas como si fueran públicas.

Se puede hacer el Syllabus del socialismo del siglo XXI que ha traído la ruina a Venezuela, y enumerar los errores así:

1. Graves violaciones de los derechos económicos y sociales.
Ya se ha dicho bastante sobre el informe de la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet. Homicidios como el de Fernando Albán, desapariciones forzadas, torturas, violencia sexual y de género contra mujeres y niñas durante su detención, y muchas otras irregularidades. Todo esto configura la crisis humanitaria que ha obligado a tantos venezolanos a huir del socialismo de siglo XXI.

2. Destrucción del salario mínimo.

El salario tiene como función darle valor al trabajo, lo cual estableció el gobierno como la mitad de un petro. El 22 de octubre pasado, Maduro dijo: “Si tengo dos petros ahorrados en bolívares, esos petros a partir de hoy (martes) son divisas convertibles, es decir, unos 120 dólares”. Un petro son 60 dólares y medio petro 30 dólares. Como el salario mínimo es de medio petro, esos 30 dólares dan, por la tasa Dicom de 20.454,31 bolívares, un sueldo de 613.629,30 bolívares. Le están pagando 150.000 bolívares de sueldo mínimo, así que falta dinero o cambiaron la manera de calcular el salario y no lo informaron.

Ver comer a gente de la basura es consecuencia de la destrucción del salario.

3. Robo de elecciones.

La más conspicua fue la presidencial, por la eliminación de los partidos de oposición y la inhabilitación de candidatos. Sin embargo, no se limitó el fraude a esas elecciones, todas han tenido algún grado de manipulación por parte de los órganos sumisos al comunismo que nos gobierna.

4. Apoyo a la guerrilla.

El presidente de Colombia, Iván Duque, denunció el apoyo de Nicolás Maduro a la guerrilla del ELN en suelo venezolano y a las FARC en el territorio colombiano.

Los presidentes Lenín Moreno y Sebastián Piñera acusan a Maduro de enviar y financiar grupos desestabilizadores a sus países y a Latinoamérica en general. Tantos presidentes no deben estar equivocados en su percepción de la política intervencionista, muy parecida a la de Cuba de los años sesenta y setenta.

5. Destrucción de la educación.

Los profesores fuera del país, los maestros en huelga, la intervención de los programas de estudio y su sesgo socialistoide, el desconocimiento de la contratación colectiva, el abandono de la planta física. Lo peor es que no hay generación de relevo en muchas profesiones, entre la mala calidad y la salida de los mejor preparados de este país inviable.

El papa Pío IX enumeró 82 errores en contra de la sociedad y la Iglesia, Maduro y su gobierno ha incurrido en muchos más en contra de nuestro noble pueblo.

Si bien Maduro puede decidir sus acciones, no es libre de elegir las consecuencias de sus actos, estas son el hambre, la miseria, el robo y la emigración. Espero que pague.

Como dijo Robert F. Kennedy: Cada sociedad tiene el tipo de criminal que se merece.

@rangelrachadell